viernes, 20 de mayo de 2011

¿Qué hago este verano con el inglés?


En las fechas en las que estamos ya he tenido tres conversaciones con personas distintas sobre este tema. Es normal, se acerca el verano y nos empezamos a plantear si un viaje al extranjero podría ayudarnos a mejorar significativamente nuestro nivel de inglés. "¿Será esta la solución? Me voy un mes a Londres, a Brighton o a Dublín y vengo con la papeleta resuelta, además de vivir una seguramente estupenda experiencia. Me apunto a un curso intensivo de 15 días, bastante caro por cierto, y seguramente podré lograr lo que años de clases en España no han logrado". Del tenor de estas frases podréis deducir que mi opinión al respecto va por derroteros distintos.
Aprender una lengua es un trabajo de fondo, una labor a realizar durante todo el año, no algo que se vaya a lograr en 15 días por muy lejos que te vayas. Viajar es un placer en primer lugar, y, para este fin , un complemento estupendo que puede ayudar, pero principalmente por la motivación que implica la experiencia de verse fuera y compartir unos días inolvidables con un grupo de estudiantes internacionales. Pero es eso: un complemento, una motivación para seguir adelante, una prueba de fuego para verse oobligado a hablar Considero mucha mejor inversión de tiempo y de dinero el tener una rutina de clases a lo largo del año. Un profesor particular es sin duda lo ideal, pero sin duda es también más caro, y el elemento social de unas clases en grupo puede ser igualmente muy positivo. Gastarse el dinero de esas vacaciones en Londres en tus clases semanales durante el año escolar es mucho más productivo y si además estudias, entonces verás realmente los resultados.

Puedes además buscar motivación asistiendo a un grupo de intercambio lingüístico, como los que organiza en Málaga Pachange, una iniciativa estupenda que consiste en  poner en contacto a personas de nacionalidad diversa para quedar cada dos semanas y hablar un rato en una lengua y otro rato en otra, produciéndose así el intercambio. Seguramente en tu ciudad podrás encontrar iniciativas similares.
Otro plan interesante, si lo que quieres es mejorar tus dotes de hablar en público, es hacerte miembro de Toastmasters Marbella, un club cuyo lema es "Give voice to your potential" (da voz a tu potencial) y que te ayudará a mejorar esta destreza de hacer presentaciones en público en inglés.

No es que yo esté intentando disuadiros de salir fuera. Voy siempre que puedo a Inglaterra, desde que tengo 13 años, y viajo con mucha frecuencia porque me apasiona. Lo que intento es concienciaros y motivaros a que mejoréis vuestro nivel de inglés de manera constante, pues de verdad que no hay fórmulas mágicas. Incluso para los que sois profesores de inglés y buscáis un reciclaje o una mejora, esto mismo os es aplicable. Yo me he ido varias veces a Inglaterra a hacer cursos de creatividad para enseñar inglés (de hecho en la foto de arriba me véis en la web de Bell International, Cambridge, donde estuve hace dos años), y la verdad que, aparte de la experiencia de compartir con otros profesores de distintas partes del mundo, no sentí que merecieran mucho la pena profesionalmente (me da mucha pena decirlo, la verdad). Mucho más productivo es estar al día leyendo, viendo series, estudiando, durante el año.Y más me seduce la idea de irte un mes a un país angloparlante a hacer un curso de fotografía por ejemplo, en el que además tus compañeros no sean igualmente estudiantes de inglés con igual o peor nivel que tú, sino gente local, pues me convence la idea de que el aprendizaje es algo que se produce mientras haces algo distinto. 

Entonces, ¿qué vas a hacer tú este verano? ¿y el resto del año?

Si te gustó este post puede que también te guste leer..
La educación en la era postdigital
Responsabilidad social corporativa
Resistencia 
Enseñar a enseñar
La clave está en las instrucciones

2 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo: Lo ideal es estudiar intensivamente durante todo el año. Mejor aún sería el año entero en Inglaterra, Irlanda o EEUU claro :p

    ResponderEliminar
  2. Gracias María por tu comentario. ¡Ese sí que es un buen plan!

    ResponderEliminar